Ya sea por trabajo, por ocio o para socializar con nuestro entorno, muchas veces no somos realmente conscientes del tiempo que pasamos frente a la pantalla del ordenador, tablet, movil...
La exposición constante a la luz azul emitida por los dispositivos digitales también puede dañar la piel y, al igual que los rayos UVA y UVB, puede provocar el envejecimiento prematuro de la piel.